Desde el momento de su creación, Outokumpu se ha considerado el experto número uno en minerales. Siempre que se descubría un yacimiento de minerales en Finlandia, se pedía a Outokumpu que investigara si la producción era viable. Si no había un método de producción establecido, lo desarrollábamos. Esta experiencia y especialización son el núcleo de nuestro negocio. Hoy, somos el líder mundial del acero inoxidable.
Las décadas de 1910–1920: De la colina misteriosa a la extracción y refinado del cobre
El inicio de Outokumpu fue el descubrimiento de un yacimiento rico en cobre (una “colina extraña” o ‘outo kumpu’ en finlandés) en Kuusjärvi, en el este de Finlandia en 1910. Unos años más tarde, comenzó la producción de cobre, primero a través de una compañía propiedad del estado finlandés junto con entidades privadas, y después como una empresa totalmente estatal. Los primeros años fundimos y refinamos cobre en una pequeña fábrica de cobre junto a la mina; incluso desde el principio, había suficiente cobre para exportar. La Primera Guerra Mundial, los desacuerdos entre los propietarios, las dificultades financieras y el capital limitado, desaceleraron el inicio de las operaciones. Sin embargo, a finales de la década de 1920, la mina había crecido para convertirse en una moderna planta de producción en masa. La primera planta fundidora de cobre se cerró en 1929 ya que Outokumpu estaba planeando una cadena integrada para el cobre.
Las décadas de 1930–1940: Productor principal de cobre
En la década de 1930, Outokumpu se convirtió en el principal productor de cobre y en exportador de mineral de cobre. Era evidente que una propiedad privada se adaptaría al desarrollo del negocio mejor que una propiedad estatal, así que en 1932 Outokumpu se convirtió en compañía limitada. Al principio, el gobierno seguía siendo el propietario de la mayor parte de las acciones de la compañía. Una vez que se produjo el cambio a compañía privada la expansión fue muy rápida: fuimos uno de los cinco principales productores de cobre en Europa y comenzamos la expansión a producción de transformados: cobre electrolítico, barras, alambrón, hojas y tubos. La rápida industrialización de Finlandia impulsó nuestras operaciones. Outokumpu creó una cadena integrada de cobre en la década de 1930 con la apertura de seis nuevas plantas, entre ellas una planta de fundición eléctrica en Imatra, la más grande de su clase en el mundo en ese momento y una refinería de cobre en Pori, en la costa oeste.
En la década de 1940, Outokumpu, como la propia Finlandia, se enfrentaba a la Segunda Guerra Mundial. Como Imatra estaba cerca de la frontera oriental, Outokumpu desmanteló la planta de fundición completa de la ruta de avance de las fuerzas militares rusas, y como era la única fuente de cobre de Finlandia, trasladó la producción a un lugar más seguro en Harjavalta, donde la instaló y puso en marcha en seis meses y no solo se trasladó, sino que duplicó la capacidad de la planta. Sin embargo, en Imatra se podía utilizar energía hidroeléctrica, lo cual no era posible en Harjavalta. Los precios de la electricidad se dispararon porque Finlandia había perdido capacidad durante la guerra. Para solventar esto, nuestras metalúrgicas idearon la fundición autógena que utiliza el calor natural de la reacción entre el hierro y los sulfuros de cobre para elevar el concentrado de mineral a una temperatura de fundición. Solo unos años más tarde, la tecnología de “fundición rápida” estaba en producción, éste fue el inicio de la división de tecnología de Outokumpu. Al mismo tiempo la compañía adquirió depósitos minerales de cobre, níquel y oro.
Las décadas de 1950–1960: Expansión a otros metales
En la década de 1950, fuimos una de las compañías mineras líderes en Europa. En las décadas de 1950 y 1960, Outokumpu abrió nuevas minas de níquel, zinc y cobre y plantas de producción de cobalto en Finlandia, convirtiéndose así en una compañía de multimetales, que refinaba mineral de sus propias minas. Así, nuestro negocio evolucionó de simple minería a las operaciones complejas del procesamiento metalúrgico. Se requirieron tanto innovación como firmes esfuerzos de Investigación y Desarrollo para refinar minerales de bajas calidades. El aumento de la minería llevó a un aumento en las ventas; tomando como base la década de 1950, para 1980 las ventas netas de Outokumpu se habían multiplicado por diez. En la década de 1950 llegó el inicio de las ventas de tecnología cuando en 1956, la primera planta de fundición rápida con licencia de Outokumpu comenzó sus operaciones en Japón.
Outokumpu buscó nuevos usos para su creciente producción de níquel, cuando un yacimiento de cromo fue descubierto por el buceador finlandés Martti Matilainen en un canal en Kemi, en el norte de Finlandia en 1959. Comenzamos a explotar el depósito de cromo en Kemi en 1960 y construimos una planta fundidora de ferrocromo en las cercanías de Tornio, donde comenzó la producción de ferrocromo en 1968. Dado que el cromo es la materia prima para el acero inoxidable y el níquel es lo que hace que perdure, la compañía ahora tenía acceso a las materias primas principales del acero inoxidable. Los estudios de viabilidad ya habían comenzado en la década de 1960.
Las décadas de 1970–1980: Compañía de minería multimetal y tecnológica
En 1976, fundimos el primer lote de acero inoxidable en Tornio que utilizaba las tecnologías de producción más reciente en ese campo. La planta era una de las fábricas de acero inoxidable más eficientes del mundo y la única con integración inversa, con nuestra propia mina de cromo en la ciudad vecina de Kemi y operaciones de ferrocromo en la misma ubicación. Al principio, Tornio producía 50,000 toneladas de acero inoxidable al año, lo que constituía la capacidad completa de Outokumpu en acero inoxidable. Las posteriores plantas de bobinado en caliente y en frío completaron la planta integrada y nos permitieron ampliar nuestra oferta de productos de acero inoxidable.
Hasta la década de 1970, nuestras plantas habían dependido de nuestras propias minas. Por entonces habíamos comenzado a agotar nuestros recursos de metales en Finlandia, la respuesta fue la expansión internacional, en primer lugar consiguiendo metales del mercado internacional y a continuación en la década de 1980 a través de nuevos depósitos y adquisiciones fuera, como la mina de zinc de Tara en Irlanda, la mina de cobre de Viscaria en Suecia y las fábricas de semiproductos en España, Suecia y Estados Unidos. También comercializamos nuestros conocimientos técnicos acumulados y desarrollados en nuestras propias minas y plantas, para otros productores, incluyendo el fundido rápido, la tecnología de refinamiento de ferrocromo y los detectores de metal. En la década de 1980, por ejemplo, un número importante de plantas de fundido de cobre y ferrocromo de todo el mundo utilizaban tecnología desarrollada por nosotros. El Grupo se convirtió en una empresa pública, Outokumpu Oyj, cuando sus acciones empezaron a cotizar en la Bolsa de Helsinki en 1988.
Las décadas de 1990–2000: Enfoque en el acero inoxidable
En la década de 1990, nuestras divisiones eran metales básicos, cobre, acero inoxidable y tecnología. La inversión para doblar la producción de acero inoxidable de Tornio estaba preparada para las operaciones en 1991, pero tan solo unos años más tarde la compañía estaba ya considerando doblar de nuevo su producción de acero inoxidable. Era la más rentable de nuestras actividades y la demanda de acero inoxidable estaba creciendo más rápido que las de otros metales. En 1997, la dirección consideró por primera vez que la compañía debía centrarse en el acero inoxidable, la pregunta era si Outokumpu debía continuar sola o combinar sus fuerzas con un competidor.
En el cambio de milenio, éramos una compañía multimetal y de minería con una base mundial de materias primas y 21,000 profesionales en todo el mundo. En 2001, anunciamos, junto con la conocida compañía de acero inoxidable Avesta Sheffield, la combinación de nuestras operaciones de acero inoxidable bajo el nombre de AvestaPolarit. Avesta Sheffield abarcó la producción de acero inoxidable tradicional en Suecia y Reino Unido. Con este acuerdo, nos convertimos en el segundo productor de acero inoxidable más grande del mundo con una capacidad anual de 1.8 millones de toneladas. Ligeramente por delante de nosotros estaba también la recién creada German ThyssenKrupp, unión de Thyssen y Krupp. Éste fue el punto clave: en 2004 decidimos centrarnos en el acero inoxidable para convertirnos en líderes mundiales de la industria y por ello Outokumpu abandonó otros metales, minería y tecnología en la década de 2000 y de 2010.
Década de 2010: Líder mundial del acero inoxidable
A principios de 2011, anunciamos la adquisición de Inoxum GmbH, las operaciones de acero inoxidable de ThyssenKrupp. Solo han pasado siete años desde la decisión de abandonar otros metales, minería y tecnología para centrarse en el acero inoxidable.
En 1976, cuando comenzamos a producir acero inoxidable, había 21 operadores de acero inoxidable en Europa. Una vez que Outokumpu adquirió Inoxum, había básicamente solo tres – Outokumpu, Acerinox y Aperam. Outokumpu se enorgullece de contar con la gama de productos más amplia del mercado, plantas rentables y modernas, nuestra propia fuente de cromo y 100 de años de experiencia especializada en metales, tecnología y minería.